lunes, 8 de octubre de 2012

SENDERO LUMINSO "EL FIN JUSTIFICA LOS MEDIOS": NO LE INTETRESA LA REINVINDICACION DE LOS MAESTROS, SOLO LIBERAR PRESOS POLITICOS Y CONTINUAR CON EL ETNOCIDIO EXPRESADO EN SU VAMPIRESCA GUERRA POPULAR

El SUTEP es una de las organizaciones sociales que desde su fundación ha generado sentimientos encontrados: el odio de la derecha y sus defensores y el aprecio de los sectores populares sanos. Durante sus 40 años de vida, el SUTEP ha desarrollado las más diversas luchas en defensa de los derechos de los maestros y del pueblo; ha formado y forma parte de organizaciones sindicales y populares como la CGTP y los Frentes de Defensa y en esa condición ha luchado contra las dictaduras del docenio militar y del fujimontesinismo entre otros, jugando muchas veces un rol protagónico en esas luchas. No es gratuito ni casual entonces ese odio visceral de los enemigos del pueblo y de sus representantes.
 En defensa de los derechos de la educación pública y del magisterio ha realizado diez huelgas, cada una de ellas con diferentes resultados, de acuerdo a la situación política y la correlación de fuerzas.
 Paradójicamente, la huelga más larga y heroica, la de 1979, terminó sin logros reivindicativos concretos; al contrario, fue la única huelga en la que no se nos pagó un solo día, los cerca de ocho mil despedidos tuvimos que esperar al siguiente gobierno para hacernos reponer y los dirigentes presos tuvieron que hacer una huelga de hambre para lograr su libertad. Por otro lado, la huelga de 1990, que pudo durar 5 días, es la que logró la más grande reivindicación concreta de la historia: la Ley 25212.
 En todas las huelgas del SUTEP los momentos del desenlace han sido siempre los más difíciles y complejos, sobre todo cuando es difícil abrir el diálogo, como en esta X Huelga. La apertura del diálogo en esas circunstancias, las justas expectativas de los maestros y su inexperiencia, generan la ilusión de que puede alcanzarse todo o gran parte de la plataforma; por lo que un resultado adverso los lleva a la desesperanza y la desconfianza.
 Posiblemente el SUTEP sea una de las organizaciones en la que se han expresado las más grandes confrontaciones ideológicas y políticas desde su fundación. A través de su historia la conducción política de las diferentes bases ha correspondido a diferentes orientaciones políticas, muchas veces diferentes y adversas a la conducción nacional. Hasta el año 1991, a pesar de esas diferencias, muy enconadas a veces, las contradicciones no llevaron a la ruptura y paralelización del sindicato. Desde la huelga de 2003, aparece en la escena el llamado CONARE – SUTEP, con organización y plataforma propias, al margen del SUTEP, cuya lucha principal no es por las reivindicaciones del magisterio sino contra el CEN del SUTEP.
 La principal estrategia del CONARE, hoy dividido (o multiplicado?) hasta en 3 facciones, es concluir que todas las huelgas han sido traicionadas, hasta la de 1990 en la que se conquistó la Ley 25212, que hoy dicen defender. Hasta en esta X Huelga en la que ellos han concluido “su” adelantada huelga sin pena ni gloria, se atreven a decir que Patria Roja ha traicionado porque los 300 nuevos soles “es muy poco”.
 Es decir, quienes hacen su huelga divisionista, que “levantan” cuando la mayoría ya está trabajando, sin haber logrado un solo punto de su plataforma, son héroes; y quienes al calor de la lucha de las masas, luego de haber revertido la imagen negativa sobre los maestros que la derecha había construido en la opinión pública, de haber posicionado su propuesta de nueva ley del profesorado para confrontarla con la propuesta continuista del gobierno, logran resolver algunos puntos de su plataforma, son traidores. Gracioso no?
 Lo que sucede es que, aquellos sectores que en 40 años no pudieron llegar a ser mayoría en la conducción nacional del SUTEP, luego de formar su propia organización divisionista, utilizan la mentira, la calumnia y la fácil acusación de traición, para generar la desconfianza en la conducción legítima y legal del gremio nacional de los maestros.
 A estas acusaciones se suman gratuitamente todos aquellos que, sin ser necesariamente senderistas o conaristas, tienen algún motivo para odiar a la conducción heredera de Horacio Zeballos, muchas veces sin ser maestros y sin conocer las complejidades de la lucha magisterial. No es la primera vez, pasarán estos momentos difíciles, las aguas volverán a su nivel, los continuadores de la huelga lo harán por 24 o 48 horas y le habrán dado en la yema del gusto a los aplicadores de las políticas neoliberales, que quisieran un SUTEP destruido para implementar sus políticas privatizadoras del servicio educativo que éste SUTEP derrotó entre 1991 y 1994. Los que asumimos el activo y el pasivo de este SUTEP glorioso seguiremos adelante, desarrollando las formas de lucha que haya que desarrollar en cada situación concreta, porque si bien esta huelga se ha suspendido, la lucha continúa.
Cordialmente
Gilberto

1 comentario:

profesor de base dijo...

Las bases de lima te exigen que des la cara.
Te fuiste al colegio de MEDICOS Y DIJISTE QUE LOS MAESTROS NOS ENTERARIAMOS POR LOS MEDIOS D COM.
IGUALITO A FUJIMORI... TRAIDOR TUS BASES TE PERSIGUEN Y DICES QUE ES SENDERO...............

quien TE ha pedido nueva ley?....EL COLEGIO DE PROFESORES...LA DERRAMA....EL GOBIERNO.....
CON TODA TU CUPULA VETE AL EXTRANJERO CON LA PLATA DE LA DERRAMA Y LLEVENSE A SU FAMILIA....